El Ayuntamiento de Avilés tiene previsto iniciar en el año 2026 el proceso de urbanización del ámbito conocido como ‘Alto del Vidriero’. Esta actuación tiene como objetivo principal recuperar un espacio de interés para la ciudad que ha sufrido un considerable retraso en su desarrollo debido al incumplimiento de los propietarios y la Junta de Compensación.
Desde el año 2008, se había planificado la transformación de esta zona en un espacio urbano con calles, zonas verdes y equipamientos públicos. Sin embargo, la Junta de Compensación ha permanecido inactiva durante más de diez años, sin realizar ninguna actuación desde 2015. Parte del terreno es propiedad de una entidad financiera que no ha mostrado interés en promover la urbanización, lo que ha impedido el avance de las obras.
Para desbloquear esta situación, el Ayuntamiento ha llevado a cabo un estudio de viabilidad de los suelos urbanos no consolidados y ha encargado un informe jurídico específico. Según este informe, la opción más eficaz es declarar el incumplimiento, extinguir la Junta de Compensación y asumir la ejecución sustitutoria, con los costes repercutidos en los titulares privados según la ley.
Los próximos pasos incluyen la actualización de la información registral en el primer semestre de 2026, la licitación para redactar el proyecto de urbanización en el segundo semestre del mismo año, y la presentación y aprobación del proyecto en 2027, con inicio de las obras de urbanización en la segunda mitad de ese año.
Es importante destacar que este procedimiento no implica expropiación, sino una ejecución sustitutoria. Los costes serán asumidos por los propietarios en función de la afectación real inscrita en el Registro de la Propiedad. En caso de impago, se aplicarán medidas de apremio, como el embargo y la enajenación forzosa de las parcelas afectadas.
Esta actuación, de interés público, permitirá la construcción de 350 viviendas, así como la creación de zonas verdes, calles y equipamientos públicos. Se logrará desbloquear un desarrollo urbanístico sin necesidad de modificar el planeamiento, y sin que los costes repercutan en el Ayuntamiento.
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