Asturias se encuentra en medio de una crisis política, con el Partido Popular arremetiendo contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y exigiendo elecciones. Miguel Tellado, secretario general del PP, ha acusado a Sánchez de corrupción sistemática y de incumplir la Constitución al no presentar los Presupuestos Generales del Estado para el año 2026.
Tellado también ha señalado casos de corrupción que afectan al entorno personal de Sánchez, como el de su hermano y su esposa. Además, ha criticado la falta de acción del Gobierno regional de Asturias, liderado por Adrián Barbón, en temas como el peaje del Huerna y la Alianza de las Infraestructuras.
Por otro lado, Álvaro Queipo, presidente del PP asturiano, ha calificado a Sánchez como un peligro para Asturias y ha denunciado la sumisión de Barbón al presidente nacional. Queipo ha instado a la necesidad de un gobierno en Asturias que no sea una «filial sanchista» y que trabaje en beneficio de los asturianos.
En este contexto político tenso, el PP se presenta como la alternativa real, prometiendo aliviar la carga fiscal, promover el acceso a la vivienda y proteger el sector primario. Con miras a las elecciones de 2027, Tellado augura que el PP ganará, ofreciendo un programa serio y riguroso para abordar los desafíos del país, como la inmigración ilegal y los subsidios a quienes nunca han cotizado en España.
En resumen, la situación política en Asturias es compleja, con acusaciones de corrupción, incumplimiento constitucional y falta de acción por parte del Gobierno regional. El PP se presenta como la opción del futuro, comprometiéndose a resolver los problemas actuales y a liderar el cambio en la región.
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