El Gobierno asturiano ha confirmado que no presentará el balance completo del plan de gestión del lobo hasta marzo de 2026, ya que se trata de un programa anual. En una comparecencia parlamentaria a petición de Vox, el consejero de Medio Rural y Política Agraria, Marcelino Marcos Líndez, explicó que el programa autoriza hasta 53 extracciones de lobos.
La metodología para estas extracciones está detallada en el plan de gestión, especificando quién puede realizar los controles y cuándo. Se basa en informes técnicos, limitándose en el espacio y en el tiempo, y está vinculada a la protección de la cabaña ganadera. Hasta el 31 de diciembre se han autorizado 174 cacerías, de las cuales 36 han sido aprobadas, 25 se llevaron a cabo, 6 fueron rechazadas y 5 no se celebraron.
A pesar de la implementación del programa, la portavoz de Vox, Carolina López, acusó al Gobierno de ocultar datos y de no publicar los resultados del plan. También ha pedido la dimisión de Marcos Líndez, argumentando que el Gobierno está poniendo trabas para evitar el control de la población de lobos en beneficio de los ganaderos.
Por otro lado, el diputado del PP Luis Venta Cueli también ha criticado al Gobierno por su falta de transparencia en la aplicación del plan, llegando incluso a presentar un recurso contencioso administrativo para exigir el derecho a la información. Según Venta, el Gobierno está protegiendo al lobo debido a la presión de grupos ecologistas.
En resumen, la gestión del lobo en Asturias sigue generando controversia y críticas por parte de la oposición, que considera que el Gobierno no está cumpliendo con sus obligaciones y está abandonando a los ganaderos en la región.
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