El Gobierno de Asturias ha anunciado que destinará más de 78 millones de euros al modelo público de gestión integral para la prevención y extinción de incendios forestales en el proyecto de presupuestos para 2026. Estas líneas de actuación se presentaron en el Comité de Prevención y Lucha contra los Incendios Forestales, donde también se anunció la intención de mejorar la gobernanza de este órgano mediante la ampliación de su composición para favorecer la participación de todos los agentes implicados.
Con esta inversión, se espera garantizar un operativo activo durante todo el año, con una planificación coordinada y complementaria a las partidas de la Consejería de Medio Rural y Política Agraria. Además, se reforzará la capacidad de respuesta ante incendios de mayor magnitud.
Entre las novedades destacadas se encuentra la creación de un fondo de cinco millones de euros para la protección de la interfaz urbano-forestal, considerada la primera línea de defensa contra el fuego. Estas ayudas directas a los ayuntamientos de menos de 50,000 habitantes permitirán reforzar la seguridad de los núcleos rurales y fomentar la implicación local en la prevención.
El Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA) superará los 53 millones de euros en 2026 y contará con más de 600 personas operativas durante todo el año, lo que se traducirá en mejores medios y condiciones laborales.
Además, se destinarán 30,7 millones de euros a la restauración ecológica, la mejora de la prevención, la modernización de medios y la dinamización de la Red Natural de Asturias (RENA), que abarca más del 30% del territorio. De esta cantidad, 13,4 millones se asignarán al cuerpo de Agentes del Medio Natural, lo que permitirá renovar vehículos y equipamientos, reforzar las herramientas digitales y mejorar las condiciones del personal.
En cuanto al Plan Anual de Prevención, Vigilancia y Extinción 2025-2026, se reforzará la vigilancia en la interfaz urbano-forestal, se impulsarán medidas de autoprotección y se consolidará el aumento progresivo de la capacidad operativa del SEPA.
El encuentro también ha servido para analizar el avance de la elaboración de la Estrategia de Prevención y Lucha contra los Incendios Forestales 2026-2030, que estará finalizada en el primer semestre de 2026. Esta estrategia incorporará nuevas medidas para ofrecer una respuesta más eficaz ante los grandes incendios forestales, basadas en un análisis estadístico de los incendios registrados en los últimos veinte años y en el comportamiento del fuego durante el pasado verano. Esto permitirá una planificación más precisa y eficiente de los recursos y actuaciones.
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